En 2025, el Banco de Alimentos de Cantabria lanza un ambicioso proyecto para combatir la pobreza severa en la región: la implementación del Programa Básico del Fondo Social Europeo Plus (FSE+), orientado a garantizar el acceso a productos de primera necesidad a familias con menores a cargo.
El corazón del programa es la distribución de tarjetas monedero recargables, que las familias podrán usar en supermercados colaboradores para adquirir alimentos esenciales, dejando atrás el modelo tradicional de reparto de lotes.
¿Cómo funciona?
Las tarjetas serán entregadas a través de los servicios sociales a familias previamente acreditadas. Estarán activadas para compras en supermercados y grandes superficies, y serán controladas para garantizar que solo se compren productos autorizados (quedan fuera, por ejemplo, bebidas alcohólicas o dulces).
Este nuevo modelo busca dignificar la experiencia de compra de los beneficiarios, al tiempo que asegura una gestión eficiente y transparente de los recursos mediante controles en tiempo real y auditorías periódicas.
Cobertura en toda Cantabria
El proyecto se desplegará en todo el territorio cántabro gracias a la amplia red logística de los supermercados que han resultado adjudicatarios en el proceso de licitación. Estas cadenas, con implantación en la mayor parte de los municipios de la región, permitirán que las tarjetas monedero puedan utilizarse de forma accesible y cercana. Además, el Banco de Alimentos de Cantabria seguirá coordinándose con más de 215 entidades colaboradoras y ayuntamientos, asegurando que ninguna familia, por remota que sea su ubicación, quede fuera de esta ayuda esencial.
Más que asistencia, un camino hacia la inclusión
La iniciativa no se limita a proporcionar alimentos: incluye acciones de acompañamiento social y laboral, como orientación, derivación a recursos formativos o sanitarios, y planes personalizados de inserción. Un enfoque que mira más allá de la necesidad inmediata para promover la autonomía y el bienestar a largo plazo.
Control y transparencia
El uso de las tarjetas estará supervisado mediante sistemas automatizados, garantizando que los fondos se utilicen adecuadamente. Cada compra quedará registrada, y cualquier uso indebido podrá ser detectado y gestionado al instante.
Compromiso social y medioambiental
El proyecto refuerza el compromiso del Banco de Alimentos de Cantabria contra el desperdicio alimentario, y se alinea con su trayectoria como entidad de referencia en la región desde 1994. En 2024, la entidad distribuyó cerca de 800.000 kg de alimentos, gracias al trabajo conjunto de su equipo técnico y más de 1000 voluntarios.
ESTABLECIMIENTOS SELECCIONADOS EN LA LICITACIÓN PÚBLICA:
- Supermercados Carrefour
- Supermercados Eroski
- Semark (Supermercados Lupa)
- Coometas (Supermercados Unide y Covirán)
